Cada temporada surge un título que consigue hacerse un rinconcito en taquilla. Son películas de una nacionalidad distinta a la norteamericana, sencillas, a las que va a ver un público que no es el que va habitualmente a ver películas en v.o. de Irán o Polonia, pero a quien de vez en cuanto les gusta ver algo diferente. Caramel fue una de ellas hace poco.
En su primera película como directora, la guapísima Nadine Labaki(que recuerda a una maggiorata italiana tipo Sabrina) nos muestra las vivencias de las empleadas de un salón de belleza en Beirut. Es un retrato amable, centrándose en sus problemas sentimentales, aunque eso no impide que de pasada nos muestre los problemas de ser mujer en ese país, con detalles como la dificultad para encontrar una habitación en un hotel de una pareja, o que otra no pueda estar hablando en un coche parado por la noche sin que les llame la atención la policia, o la operación de reconstrucción del hímen a la que se somete una de las protagonistas.
Una relación con un hombre casado, un noviazgo con una boda a la vista, una homosexualidad aún no asumida del todo, el miedo a la vejez o la soledad, son las diferentes facetas que nos muestran cada una de las protagonistas en algunos momentos, totalmente identificables para cualquier mujer.
El título hace referencia a la mezcla de azúcar, agua y limón que usan en la depilación, algo que para las que ya estamos acostumbradas a la eléctrica o láser nos suena sumamente exótico y aromático… pero no nos importaría prescindir de ello. Retoma el sensualismo de El marido de la peluquera en la forma de mostrar cómo se lava o corta el pelo, toda una experiencia religiosa, como puede verse.
Se nota la procedencia del mundo de los videoclips de a directora por el uso de las canciones, pero se ha de reconocer el cariño con que trata a los personajes, y sin ser una obra maestra es una película que se ve con agrado, dejando con una sonrisa. El final puede dejar un poco descolocado, ya que ninguna historia acaba del todo; todas están en camino de un posible final feliz, todo depende de la opción que elijan. Que la escena más romántica de la película sea una falsa conversación telefónica no deja de ser significativo en cierta manera, ya que el problema que tienen casi todas las parejas de la película es de comunicación. De manera que ya estáis avisados y no podeís decir "y yo con estos pelos".
En su primera película como directora, la guapísima Nadine Labaki(que recuerda a una maggiorata italiana tipo Sabrina) nos muestra las vivencias de las empleadas de un salón de belleza en Beirut. Es un retrato amable, centrándose en sus problemas sentimentales, aunque eso no impide que de pasada nos muestre los problemas de ser mujer en ese país, con detalles como la dificultad para encontrar una habitación en un hotel de una pareja, o que otra no pueda estar hablando en un coche parado por la noche sin que les llame la atención la policia, o la operación de reconstrucción del hímen a la que se somete una de las protagonistas.
Una relación con un hombre casado, un noviazgo con una boda a la vista, una homosexualidad aún no asumida del todo, el miedo a la vejez o la soledad, son las diferentes facetas que nos muestran cada una de las protagonistas en algunos momentos, totalmente identificables para cualquier mujer.
El título hace referencia a la mezcla de azúcar, agua y limón que usan en la depilación, algo que para las que ya estamos acostumbradas a la eléctrica o láser nos suena sumamente exótico y aromático… pero no nos importaría prescindir de ello. Retoma el sensualismo de El marido de la peluquera en la forma de mostrar cómo se lava o corta el pelo, toda una experiencia religiosa, como puede verse.
Se nota la procedencia del mundo de los videoclips de a directora por el uso de las canciones, pero se ha de reconocer el cariño con que trata a los personajes, y sin ser una obra maestra es una película que se ve con agrado, dejando con una sonrisa. El final puede dejar un poco descolocado, ya que ninguna historia acaba del todo; todas están en camino de un posible final feliz, todo depende de la opción que elijan. Que la escena más romántica de la película sea una falsa conversación telefónica no deja de ser significativo en cierta manera, ya que el problema que tienen casi todas las parejas de la película es de comunicación. De manera que ya estáis avisados y no podeís decir "y yo con estos pelos".
9 comentarios:
Sí, no es que sea una maravilla pero agradable de ver y una pequeña sorpresa. Con el plus añadido de mostrarnos que desde el Líbano también se puede hacer una comedia, triste, alegre, romántica... y de nivel; y además dirigida e interpretada por una mujer Nadine Labaki (¡esto es casi cine de autor!).
Por cierto, de lo que más me acuerdo tal vez es del personaje de la mujer que intenta vivir de su imagen (spots, televisión...) y se niega a envejecer.
Ya hace un tiempito que la pasaron aquí en Las Palmas. La verdad es que vale la pena ir a verla. Está más que correcta y aunque no estemos hablando de obra maestra, le puede dar un sable a más de una de nuestro ínclito Almodóvar (que Boyero le guarde).
Suelo ser un degustador de estas pelis carentes de toda publicidad y estrenadas casi de tapadillo. Suelen deparar más de una sorpresa, pero, pero, pero también alguna decepción. Sin ir más lejos este domingo salí del cine maldiciendo a la madre del bodrio titulado "Vacaciones en Ferragosto", más me hubiera valido comprar un buen tarro de palomitas y una cola y colarme en "Terminator Salvation", es un decir.
Un abrazote.
Cierto que el personaje de la mujer que se niega a envejecer es uno de los más divertidos, Carles, pero también me gustó el personaje de la mujer mayor que tiene que cuidar a su hermana enferma.
De acuerdo en que, sin ser una película que pasará a la historia del cine, Antonio, es agradable de ver; tal vez no tardemos demasiado en olvidarla pero te hace sonreir mientras la ves. Y lo que dices de que alguna vez te puedes encontrar grandes sorpresas en película de ese estilo, pero también alguna que otra decepción, por supuesto es cierto, pero lo mismo puede decirse de películas hollywoodienses que creemos que son entretenimiento sin complicaciones bien hechas, y luego sale... ¿Wolverine, por decir alguna reciente?
Ah! La de la mujer mayor atada a su madre es como la guinda final. Sí.
Era una historia bonita, Carles; siempre me han gustado los romances otoñales... aunque éste no acabe demasiado bien.
a mi es una película que sin esperar lo que iba a ver, me gustó muchísimo
besos
Bienvenida, Bargalloneta. Siempre es agradable que una película te sorprenda, y más cuando se va sin ninguna idea preconcebida. Saludos.
Recuerdo que la fui a ver con mi madre, no sabíamos ni de qué iba, una compañera me dijo que me gustaría. Y efectivamente, como dices, no es una gran maravilla, pero es de esas pelis amables que se dejan ver con una sonrisa en los labios, pequeñas historias, en las que simpre te sientes identificado con alguna... y aunque su fianl no sea feliz en toda regla, uno prefiere pensar, así como salen las letras que todo se va arreglar y sus personajes sí será felices para siempre!
Veo que coincides con todos, Marguis, en que pese a no considerarla una obra maestra (ni falta que hace) resulta muy agradable de ver, que al fin y al cabo es lo que importa. El espectador es quien decide imaginar qué final tendrá cada uno de los personajes, y eso tampoco está mal.
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