Confesémoslo. Todo cinéfilo tiene su punto de voyeur, que disfruta de ver cualquier tipo de perversión en la pantalla sabiendo que está impune en la oscuridad de la sala y que lo que ve no es cierto. Por eso, cuando aparece un director que lo ofrece a manos llenas lo abraza reconociéndole como hermano y automáticamente lo convierte en un director de culto. Eso pasa con David Cronenberg.
Este canadiense es el especialista en el llamado “horror corporal”: es habitual en él ver mutaciones genéticas o armas de aspecto orgánico y él mismo ha definido que sus películas deberían ser vistas “desde el punto de vista de la enfermedad”. Con él es posible ver una consola de videojuegos con tacto humano que se conecta al cuerpo, o una persona puede abrir su vientre para convertirse en un reproductor de cintas de video, por citar algunos ejemplos. Las máquinas tienen algo de humano y las personas algo de inhumano Su forma de ver el sexo y la violencia también son personales; no son experiencias liberadoras o divertidas, sino sucias, obsesivas, destructivas… No hay monstruos extraños, sino que están en nuestro interior. No deja de ser interesante la evolución de los personajes de sus películas, en las primeras científicos modificaban otros cuerpos humanos, en las posteriores los científicos modificaban sus propios cuerpos.
Del gore de Vinieron de dentro de, o Rabia, pasó a una especie de ciencia ficción fría e inquietante de Scanners o La zona muerta y de ahí a La mosca, con la que consiguió una auténtica unanimidad de crítica y público, haciendo un remake totalmente propio y superior al original. Siguió Inseparables, en la que todo estaba mucho mas interiorizado, pero estaba llena de una atmósfera malsana opresiva, en la que dos hermanos gemelos ginecólogos sentían fascinación por las mutaciones genéticas de los órganos sexuales femeninos y diseñaban un delirante y retorcido instrumental quirúrgico. Spider fue un inquietante estudio sobre la locura y su relación con la sexualidad
Y llegamos a Una historia de violencia y Promesas del este, dos espléndidas películas que hicieron dudar de si el Cronenberg de siempre se había vuelto más comercial y había dejado su “lado oscuro”. Yo no lo creo así; todas sus obsesiones siguen allí, con la misma fuerza de siempre, pero todo está tratado con la sabiduría de la madurez. Puede parecer que nos ofrece una flor, pero está envenenada. Ya no necesita fuegos artificiales para decir las cosas, ha descubierto que con el clasicismo se puede decir lo mismo de manera mucho más sutil, mejorado incluso por su ya absoluto dominio de la técnica (ahí está como ejemplo la escena de los baños turcos).
Nos ha mostrado el lado más inquietante de Christopher Walken, James Woods, Jeremy Irons, Ralph Fiennes o Viggo Mortensen, que no es poco. De hecho, tanto Woods como Irons, o Peter Weller tienen un cierto parecido físico con él. Os aseguro que tengo ganas de ver con qué piensa sorprendernos de nuevo.
6 comentarios:
He de confesar, compa Alicia, que no soy fiel seguidor de Cronenberg (del que he visto algunas pelis, no muchas, y no con excesivo entusiasmo), pero, a tenor de cómo lo glosas, y qué perspectiva le das a su cine, puedo entender perfectamente que goce de tantos y tan fieles seguidores.
Un abrazo.
Llevas razón, Alicia, en que Cronenberg ha sido un director que nos ha fascinado por su capacidad de envolvernos en una atmósfera malsana y oscura, en ocasiones hasta incómoda; pero desde "Una Historia de Violencia" y sobre todo "Promesas del Este" Cronenbarg ha dado un tremendo salto cualitativo y nos muestra su capacidad de construir unas películas excelentes, en el caso de "Promesas", casi una obra perfecta.
Como tú, espero con verdadera curiosidad el próximo trabajo de este maestro de lo oscuro.
Un abrazote.
Pues nada más que añadir. Totalmente de acuerdo
Saludos
Pues si te he hecho entender el porqué nos gusta tanto, Manuel, ya es mucho. Reconozco que es uno de los directores "raritos", pero a la que entras en su mundo puede resultar fascinante.
Deseandito estoy de ver qué puede hacer Cronenberg después de haber conseguido dos películas tan magníficas como Una historia de violencia y Promesas del este, Anro, pero ojalá siga en esa línea.
Da gusto hablar contigo, Möbius. Saludos también.
Hola! de vez en cuando paso por aquí. Dado que también os gusta Cronenberg he encontrado una pequeña pieza documental en la red sobre la Nueva Carne, quizás os interese:
http://vids.myspace.com/index.cfm?fuseaction=vids.individual&VideoID=21619980
Ciao!
Muchísimas gracias por el enlace,Anónimo. Yo el documental que había visto es Bless the new flesh, que trata de Cronenberg, y está realmente bien, con entrevistas a Scorsese y muchas gente más
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