Si, no me mires así. Te estoy hablando a ti, Robert Mario De Niro Jr., así que no cuelgues el teléfono.
Aunque tienes mas sangre irlandesa que italiana, te has especializado en interpretar a mafiosi. De hecho, curiosamente, han servido para que te concedieran la ciudadanía de honor italiana, aunque no es que hayas dado muy buena imagen de ellos, precisamente. Tal vez sea cierto eso de que “es mejor que hablen mal de uno a que no hablen.”
Si te hiciera falta presentar un currículum al hacer una película sería impresionante: Toro salvaje, Taxi driver, El cazador, El padrino II, Erase una vez en América, Novecento,Uno de los nuestros... Con tantas películas tan buenas en tan poco tiempo, te convertiste de inmediato en una especie de mito viviente: eras el ídolo de cualquier actor, la referencia obligada de cualquier interpretación.
Obsesivo y perfeccionista hasta el límite (el método hasta el infinito y más allá), has adelgazado o engordado como si fueras de goma, te has tatuado, has aprendido a tocar el saxofón, te sacaste licencia de taxista. Con tu actuación como Vito Corleone en El padrino II se lo pusiste a los críticos en bandeja de plata: eras el sucesor de Marlon Brando. The score os reunió y significó un nuevo relevo de poder: Brando- De Niro- Norton.
Encontraste un director con el que te entendías a la perfección, Marty, aunque él fuera de Little Italy y tú de la Cocina del Infierno, entre vosotros se produjo esa magia especial que aparece muy pocas veces en el cine entre director y actor. Ahí va la lista: Malas calles, Taxi driver, Toro salvaje, Uno de los nuestros, El cabo del miedo, Casino, New York, New York y El rey de la comedia. Tela marinera.
Pero de pronto dejaste de elegir proyectos ambiciosos, decidiste reírte de tus propios papeles de gangster en Una (y otra) terapia peligrosa o hasta incluso de ti mismo, te embarcaste en proyectos comerciales. De acuerdo que tú mismo confesaste que necesitabas dinero para Tribeca, y por otro lado comprendo que ya no necesitas demostrar nada por la sencilla razón que ya lo has hecho todo y que actuar ya no supone ningún desafío para ti. Ahora parece que te interesa mucho más la dirección y después de haber mostrado que habías aprendido muy bien las lecciones de Scorsese en Una historia del Bronx, con El buen pastor has querido ir mas allá. Por nosotros perfecto. Pero no nos abandones, vuelve a demostrar porqué se te ha considerado uno de los actores mas grandes de todos los tiempos, porque te echamos de menos. Porque tú... tú... eres bueno. ¿Bobby? ¿BOBBY?...
Aunque tienes mas sangre irlandesa que italiana, te has especializado en interpretar a mafiosi. De hecho, curiosamente, han servido para que te concedieran la ciudadanía de honor italiana, aunque no es que hayas dado muy buena imagen de ellos, precisamente. Tal vez sea cierto eso de que “es mejor que hablen mal de uno a que no hablen.”
Si te hiciera falta presentar un currículum al hacer una película sería impresionante: Toro salvaje, Taxi driver, El cazador, El padrino II, Erase una vez en América, Novecento,Uno de los nuestros... Con tantas películas tan buenas en tan poco tiempo, te convertiste de inmediato en una especie de mito viviente: eras el ídolo de cualquier actor, la referencia obligada de cualquier interpretación.
Obsesivo y perfeccionista hasta el límite (el método hasta el infinito y más allá), has adelgazado o engordado como si fueras de goma, te has tatuado, has aprendido a tocar el saxofón, te sacaste licencia de taxista. Con tu actuación como Vito Corleone en El padrino II se lo pusiste a los críticos en bandeja de plata: eras el sucesor de Marlon Brando. The score os reunió y significó un nuevo relevo de poder: Brando- De Niro- Norton.
Encontraste un director con el que te entendías a la perfección, Marty, aunque él fuera de Little Italy y tú de la Cocina del Infierno, entre vosotros se produjo esa magia especial que aparece muy pocas veces en el cine entre director y actor. Ahí va la lista: Malas calles, Taxi driver, Toro salvaje, Uno de los nuestros, El cabo del miedo, Casino, New York, New York y El rey de la comedia. Tela marinera.
Pero de pronto dejaste de elegir proyectos ambiciosos, decidiste reírte de tus propios papeles de gangster en Una (y otra) terapia peligrosa o hasta incluso de ti mismo, te embarcaste en proyectos comerciales. De acuerdo que tú mismo confesaste que necesitabas dinero para Tribeca, y por otro lado comprendo que ya no necesitas demostrar nada por la sencilla razón que ya lo has hecho todo y que actuar ya no supone ningún desafío para ti. Ahora parece que te interesa mucho más la dirección y después de haber mostrado que habías aprendido muy bien las lecciones de Scorsese en Una historia del Bronx, con El buen pastor has querido ir mas allá. Por nosotros perfecto. Pero no nos abandones, vuelve a demostrar porqué se te ha considerado uno de los actores mas grandes de todos los tiempos, porque te echamos de menos. Porque tú... tú... eres bueno. ¿Bobby? ¿BOBBY?...
8 comentarios:
Pues eso, que a ver si tito Bobby se nos anima y vuelve a regalarnos una de esas interpretaciones a las que nos tenía acostumbrados, que le veo yo muy desganado últimamente, aunque es cierto que este hombre ya no tiene nada que demostrar, y se ve que en películas como las dos Terapias Peligrosas o Los Padres de Ella/El se lo pasa en grande... pero aún así, da pena verlo en según que películas, desperdiciando su talento. Espero con impaciencia esa película que, según parece, va a rodar con Scorsese: el cielo ha escuchado mis plegarias!!!
Me ha gustado el post.
Sí, vamos a ver si ese nuevo proyecto con Scorsese nos devuelve al mejor De Niro, que con tanta comedieta y film de acción de poca monta hay "mono" del auténtico buen De Niro.
El tiempo pasa, y siempre puede hacer alguna joya, aunque sea en forma de secundario. Y si no, que se fije en Michael Caine.
Totalmente de acuerdo con vosotros: grande, grande, grande (aunque, últimamente, y un poco como Jack Nicholson, que parece deslizarse por pendientes similares, bastante sobrado y abusando de la vena histriónica). Y, desde luego, habrá que ver ese proyecto, cuando cuaje, qué es lo que nos ofrece: apunta a algo grande, pero, como todo melón, hasta que no se abra...
Un abrazo.
Creo que todos estamos de acuerdo en lo grande que ha sido De Niro (Laura, Cineahora, Manuel), por eso precisamente duele mas verle en proyectos tan puramente alimentícios como El escondite o Showtime, por ejemplo. Por lo visto Bobby quería rodar diez películas con Marty, así que aún le quedaría alguna, ojalá volvamos a ver de nuevo al gran De Niro que todos echamos de menos.
Hola Alicia, tocaya..perdona mis ausencias, en mil historias estoy involucrada..y contenta!.
Qué decir de este peazo de actor??? siempre me ha dado morbillo, hasta que claro, vi peliculas como...como el escondite!!!!! que horrorrrrrrrrrrrrrrrr....me quedo con Taxidriver...toro salvaje...haciendo de mafiosillo...esas si que perdurarán.
Muchos besos a los dos..
Lápices...........
No hay nada que perdonar, Alicia. El escondite es penosa y la idea de De Niro haciendo de Nicholson de El resplandor falla por todas partes. Una de sus interpretaciones que me gusta mas de él y sin embargo no es demasiado nombrada es la New York, New York; está espléndido como egoista y grandísimo hijo de su madre.
Es que, Alicia, New York, New York es una película que nadie recuerda, ni cuando se habla de la filmografía de De Niro ni de la de Scorsese... ¡con lo que nos gusta a ti y a mi! (debemos de ser sus mayores "fans"). Vamos a tener que reivindicarla. Todavía no le habeis dedicado post ¿verdad? pues ya sabes: la película se lo merece, así que a ello...
Pues si, Laura, New York New York me gusta demasiado para no acabar, tarde o temprano, dedicándole un post en La linterna
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