Ingmar Bergman, el director de cine sueco más famoso de la historia, ha fallecido hoy a los 89 años de edad.
Su infancia fue bastante parecida a la del protagonista de Fanny y Alexander: un niño de gran imaginación y fascinado por el teatro que tiene que hacer frente a un padrastro sacerdote muy estricto. Se ha hablado mucho del “silencio de Dios” de sus películas (tipo Persona), pero también hay un Bergman más ligero, divertido y a quien le gusta disfrutar del sexo, como el de Sonrisas de una noche de verano, e incluso hizo una película tan aterradora como Los huevos de la serpiente. También ha sido uno de los que mejor ha diseccionado el mundo de la pareja, y su visión de la Edad Media en El séptimo sello o El manantial de la doncella es de las mejores que ha habido: por un lado fanatismo religioso, por otro los instintos mas bajos, suciedad y pobreza. Magnífico director de actores, supo sacar el mejor partido de Max Von Sydow, Liv Ullman o Ingrid Thulin. Dos de los suecos más internacionales, que compartían el apellido, él e Ingrid Bergman, juntaron su talento en Sonata de otoño. Director de cabecera de muchas generaciones de cineastas, aunque también sumo hacedor de bostezos e incomprensión entre buena parte del espectador medio, su nombre es marca de fábrica de una manera de hacer cine, y una bandera de incalculable valor a la hora de defender el prestigio cinéfilo del cine europeo. Desde aquí, en nuestro humilde blog, y aunque nunca hemos sido seguidores del bergmanismo, no podíamos dejar de reseñar su figura en un día como hoy; a fin de cuentas, su autobiografía se llamó como nosotros: “La Linterna Mágica”. Por fin la Muerte ganó la partida de ajedrez. Te acompañamos en el sentimiento, Woody.
Su infancia fue bastante parecida a la del protagonista de Fanny y Alexander: un niño de gran imaginación y fascinado por el teatro que tiene que hacer frente a un padrastro sacerdote muy estricto. Se ha hablado mucho del “silencio de Dios” de sus películas (tipo Persona), pero también hay un Bergman más ligero, divertido y a quien le gusta disfrutar del sexo, como el de Sonrisas de una noche de verano, e incluso hizo una película tan aterradora como Los huevos de la serpiente. También ha sido uno de los que mejor ha diseccionado el mundo de la pareja, y su visión de la Edad Media en El séptimo sello o El manantial de la doncella es de las mejores que ha habido: por un lado fanatismo religioso, por otro los instintos mas bajos, suciedad y pobreza. Magnífico director de actores, supo sacar el mejor partido de Max Von Sydow, Liv Ullman o Ingrid Thulin. Dos de los suecos más internacionales, que compartían el apellido, él e Ingrid Bergman, juntaron su talento en Sonata de otoño. Director de cabecera de muchas generaciones de cineastas, aunque también sumo hacedor de bostezos e incomprensión entre buena parte del espectador medio, su nombre es marca de fábrica de una manera de hacer cine, y una bandera de incalculable valor a la hora de defender el prestigio cinéfilo del cine europeo. Desde aquí, en nuestro humilde blog, y aunque nunca hemos sido seguidores del bergmanismo, no podíamos dejar de reseñar su figura en un día como hoy; a fin de cuentas, su autobiografía se llamó como nosotros: “La Linterna Mágica”. Por fin la Muerte ganó la partida de ajedrez. Te acompañamos en el sentimiento, Woody.
7 comentarios:
Se fue un verdadero grande.
Para recordarlo volví a leer esta tarde el ensayo de Susan Sontag de 1962 sobre Persona, en el que decía, simplemente, lo siguiente: "...el más moderno de los directores...". Y no precisamente por mover la cámara de forma caótica ni fragmentar un plano en cien partes.
Saludos.
Muy buen homenaje en este post. Gracias!
Aunque ha sido un post precipitado, como os podeis imaginar, Hernán y JLPA, nadie puede discutir el talento de Bergman
En mi caso, he de reconocer que no soy un entusiasta de Bergman. Admiro "Fanny y Alexander" y "El séptimo sello", pero no puedo con "Fresas salvajes", por ejemplo, rebosa artificialidad, aún a costa de llevarme una ensalada de tomatazos. Lo que más le agradezco es que haya sido una referencia para Woody Allen. Es, sin embargo, un clásico y una referencia indiscutible y la noticia de su fallecimiento no podía faltar en la Linterna. Descanse en paz.
Hacia ya tiempo que no filmaba para el cine. Incluso "Saraband" estaba pensada para la televisión. Pero su obra, y su legado es inmortal.
Bueno, que muy pocos cineastas se han atrevido a contar y a filmar lo que él hacia.
Amar el cine es amar a Bergman.
Si bien no soy un gran admirador sería un necio si no lo reconociese como lo grande que es. Hoy el cine ha perdido un poco de su esencia. Saludos!
Una de las cosas que me parecen mas curiosas de él, Cineahora y Budokan, es que de pocos directores tenemos tantas películas que expliquen tanto su vida: su infancia en Fanny y Alexander, la vida de sus padres en Las mejores intenciones...
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