Tras estrenarse como director de cine con éxito con Enrique V, la crítica esperaba con curiosidad la próxima película del que consideraban el nuevo niño prodigio del cine británico ¿sería de nuevo un clásico del teatro, confirmándolo como sucesor de Laurence Olivier?. Pues no, Kenneth Branagh de nuevo volvió a sorprender a todos con Morir todavía.
¿Qué era esto? ¿Quien podía tomarse en serio una película sobre reencarnaciones e intriga policíaca? Niño malo, con lo que prometía!
Y sin embargo, Morir todavía es un divertido ejercicio de estilo, en la que Branagh se lo tuvo que pasar en grande homenajeando tanto a Alfred Hitchcock como a Orson Welles, así como a las películas de serie B de las que ya ha hablando anteriormente marcbranches La historia de un detective, Mike Church (Kenneth Branagh) que intenta averiguar la identidad de una misteriosa mujer,Grace (Emma Thompson), que no sabe quien es y tiene unas pesadillas constantes y acaban recurriendo a la hipnosis, en la que ella recuerda un crimen que ocurrió hace años, tiene más de un motivo de interés.
¿Por ejemplo? Para empezar un magnífico Robin Williams como inquietante ex-psiquiatra, adelantándose a Hannibal Lecter, que consigue adueñarse de las pocas escenas en las que aparece.
¿Seguimos? Escenas realmente brillantes, como el interrogatorio a un avejentado Andy García, rematada por un diálogo “¿Fuma?” “Acabo de dejarlo”, que enlaza con una conversación anterior con el susodicho psiquiatra, memorable; o el momento en que Mike, en un momento de confusión, llama a Grace por su anterior nombre.
¿Mas? La fotografía de toda la historia del pasado, en glorioso blanco y negro, y no hablemos del guiño de hacer que el personaje de Derek Jacobi tartamudee, como su inolvidable Claudio.
El ritmo del suspense está bien llevado, mezclando presente y pasado, a medida que se suceden las sesiones de hipnosis; por una extraña razón, los personajes de pasado tienen más atractivo que los del presente: El : Roman Strauss (Branagh, again), famoso compositor, celoso, con un lado oscuro que no puede faltar en ningún galán romántico que se precie. Ella: Margaret (Thompson, again) famosa pianista, y aunque está segura de sí misma (algo inevitable en Emma Thompson), empezará a tener dudas acerca de su flamante marido. Unas tijeras pondrán fin a lo que parecía una pareja perfecta.
El magnífico reparto, que aparte de Branagh y Thompson (estábamos en plena época KenEm, aunque reconozco que aquí no tienen la misma química que en Mucho ruido y pocas nueces) incluye a los ya mencionados Robin Williams, Derek Jacobi, Andy Garcia, además de Hanna Schygulla y Campbell Scott.
El desenlace es sorprendente, después de algún que otro giro en el guión, y el simbolismo de las tijeras está aprovechado al máximo. Roman y Margaret tal vez se querían lo suficiente como para tener otra oportunidad....en otra vida. ¿y acaso hay alguien que no se merezca una segunda oportunidad?
2 comentarios:
Me vuelves a tocar la fibra, Alicia.Esta es sin duda una de las mejores películas de Kenneth Branagh. Un cocktail hitchckokiano (menudo palabrejo!!!) de suspense ejemplar.
Llevado con muy buen pulso por Branagh (que está magnífico tanto delante como detrás de las cámaras) y apoyado en un guión formidable que mantiene la intriga hasta el final.
Branagh compensa a la perfección la parte romántica del film (muy poca en verdad), con la absorbente y enigmática trama.
Emma Thompson está sensacional y además sale encantadora. Desde este papel no pararía de ascender en su carrera.
El cambio a blanco y negro en las escenas del pasado es brillante y la música de Doyle (como no) estupenda.
PD: Me encanta el cameo que hace el propio Doyle como polícia en la película (es lo que tiene ser un poco mitómano).
Ya sabes que no puedo ser imparcial hablando de Kenny, Juan Ramón, (tampoco quiero serlo), pero creo que Morir todavia es una buena muestra de que Branagh no solo es Shakespeare,aunque no por eso dejo de esperar a que se estrene Como gusteis de una vez. Esperemos que haya mas suerte que con La flauta mágica.
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