“FIREFLY”, O LA RESURRECCIÓN DE LOS CASACAS MARRONES
Joss Whedon tiene pinta de friki. No de esos que se disfrazan o se pasan el día con las pestañas y el prepucio delante del ordenador, sino de los del estilo Kevin Smith: grandes connaiseurs de la cultura popular, activistas del cómic y la TV, fans irredentos que, casualmente, han conseguido meter su camiseta temática en el mundillo. Whedon es el creador de tres series americanas con vocación de títulos de culto y hordas de seguidores indesmayables. Dos de ellas están interrelacionadas (“Buffy” y “Angel”). La otra es, quizás, su gran triunfo, precisamente por ser su gran fracaso: “Firefly”. ¿Paradoja?
“Firefly”, que trataba las aventuras de un grupo de contrabandistas espaciales a bordo de una nave llamada “Serenity”, era una serie que combinaba la ciencia-ficción de segunda mano al estilo “Star Wars” con elementos propios del western (hay algún episodio con clarísimas reminiscencias de “Sin perdón”), un humor tan blanco como acerado, unos diálogos ingeniosos y unos personajes de caracteres muy diferenciados que destilaban una gran química. Sus aventuras fronterizas no consiguieron fidelizar, aparentemente, a los espectadores, y la FOX liquidó la serie en el capítulo 11, sin dejar que se emitiesen los tres capítulos restantes que se habían rodado, justo cuando empezaba a tejerse una trama mayor. Otra serie más al limbo. Sin embargo, Whedon & company descubrieron que quizás sí que había pocos seguidores, pero muy entregados. El DVD de la serie fue un récord de ventas (hasta hace muy poco aún estaba entre los 5 más vendidos en Amazon.com), e internet puso en marcha su capacidad para el bocinazo ensordecedor de los fans (llamados “browncoats”, o “casacas marrones”; si queréis saber por qué, cojan el primer autobús a la Wiki). A Whedon, que de tonto no tiene un pelo, se le iluminó la meninge, y, contra todo pronóstico, consiguió algo así como que España pase unos cuartos de final: hacer una película de una serie fracasada. ¿Es Whedon Iker Casillas?
Joss Whedon tiene pinta de friki. No de esos que se disfrazan o se pasan el día con las pestañas y el prepucio delante del ordenador, sino de los del estilo Kevin Smith: grandes connaiseurs de la cultura popular, activistas del cómic y la TV, fans irredentos que, casualmente, han conseguido meter su camiseta temática en el mundillo. Whedon es el creador de tres series americanas con vocación de títulos de culto y hordas de seguidores indesmayables. Dos de ellas están interrelacionadas (“Buffy” y “Angel”). La otra es, quizás, su gran triunfo, precisamente por ser su gran fracaso: “Firefly”. ¿Paradoja?
“Firefly”, que trataba las aventuras de un grupo de contrabandistas espaciales a bordo de una nave llamada “Serenity”, era una serie que combinaba la ciencia-ficción de segunda mano al estilo “Star Wars” con elementos propios del western (hay algún episodio con clarísimas reminiscencias de “Sin perdón”), un humor tan blanco como acerado, unos diálogos ingeniosos y unos personajes de caracteres muy diferenciados que destilaban una gran química. Sus aventuras fronterizas no consiguieron fidelizar, aparentemente, a los espectadores, y la FOX liquidó la serie en el capítulo 11, sin dejar que se emitiesen los tres capítulos restantes que se habían rodado, justo cuando empezaba a tejerse una trama mayor. Otra serie más al limbo. Sin embargo, Whedon & company descubrieron que quizás sí que había pocos seguidores, pero muy entregados. El DVD de la serie fue un récord de ventas (hasta hace muy poco aún estaba entre los 5 más vendidos en Amazon.com), e internet puso en marcha su capacidad para el bocinazo ensordecedor de los fans (llamados “browncoats”, o “casacas marrones”; si queréis saber por qué, cojan el primer autobús a la Wiki). A Whedon, que de tonto no tiene un pelo, se le iluminó la meninge, y, contra todo pronóstico, consiguió algo así como que España pase unos cuartos de final: hacer una película de una serie fracasada. ¿Es Whedon Iker Casillas?
“SERENITY”, THE RIVER TAM CHRONICLES
Pasado el año 2500, la hoy llamada “Tierra-que-fue” es casi un mito para el ser humano. El hombre, una vez la Tierra agotó sus recursos naturales, se expandió a diferentes lunas y sistemas solares que “terraformó”, uséase, adaptó a sus condiciones de vida (aire, agua, casas de citas, etc.). China y los Estados Unidos quedaron como únicas potencias, y se fusionaron para crear una sola estructura de dominación interestelar, la Alianza. A pesar de los avances, a medida que los planetas se alejan más de la zona central, las condiciones de vida y las costumbres son más ancestrales y fronterizas. Este es el punto de partida atmosférico de la serie “Firefly” y de la película “Serenity”, y en la que se incrusta la pintoresca tripulación de la susodicha nave, comandada por un ex-combatiente llamado Malcolm Reynolds (Nathan Fillion), y en la que está, entre otros, River Tam (Summer Glau), una chica hipersensible, plañidera, ingenua, intuitiva, esquizofrénica, y con poderes mentales. Excepto por esto último, una adolescente cualquiera. Que en la película demuestra tener alguna clave para hacer tambalear a la poderosa Alianza, aparte de, inopinadamente, dar una leches que ni Jackie Chan enfarlopado. Hasta aquí, más mal que bien, la sinopsis.
¿Y qué es en realidad “Serenity”? Después de haber visto esta película desde los dos prismas (esto es, antes de conocer la serie y después de verla), la considero una de las mejores películas del género de los últimos años. Se la ha comparado extenuantemente en los Yuesei con “Star Wars”, no por su grandeza, claro, sino más bien por el inevitable dejá vu que desprende. Mal Reynolds apesta a Han Solo, indumentaria incluida; la estética de futurismo usado, naves que se caen a pedazos, uniformes sucios, espacios desérticos; el aroma de “space opera” (hay un imperio interestelar, y una guerra que marca el pasado), en definitiva. Eso sí, no hay extraterrestres ni robots, para no entorpecer el otro gran referente estético, que, como ya se ha apuntado, es el western. Algo que en la película queda más difuso, al permitirse un mayor número de localizaciones. “Serenity” es algo así como “Star Wars” 2.0, o lo que el “Episodio I” pudo ser y no fue: una actualización del género hacia los tiempos modernos. Es un film enérgico, divertido, entretenido, sin alardes de CGI, bien dialogado (Kaylee: “hace un año que no tengo entre las piernas nada que no funcione con pilas”), que al espectador no familiarizado con el entorno “Firefly” le deja un buen e inesperado sabor de boca. No se puede decir que Whedon tenga un estilo propio con la cámara (queda claro que su fuerte está en la escritura), pero sale lo suficientemente airoso de la prueba.
La mayor debilidad del film proviene, como era de esperar, de su dependencia de la serie. Son nueve personajes principales, y en una serie se pueden desarrollar adecuadamente, pero en una película no. A pesar del (falso) plano-secuencia del inicio, que pretende presentar a los personajes uno a uno, lo cierto es que Whedon se ve obligado a detenerse en los tres personajes principales, dejando a los demás bastante difuminados. Uno de estos tres es de nuevo cuño, el Operativo, excelente villano interpretado de manera ceremoniosa, casi religiosa, por el gran Chiwetel Ejiofor. Otro es el ya mencionado Mal Reynolds, antihéroe a la vieja usanza, de réplica y gatillo fácil, corteza coriácea y savia dulce, al que la percha de Nathan Fillion le sienta como un guante. El último es River Tam, el verdadero centro neurálgico de la serie (según Whedon, “Serenity” es “la historia de Malcolm Reynolds contada por River”) y de la película, que tiene la virtud de aparecer poco pero dejando huella, un personaje al que la etérea Summer Glau aporta una convincente fragilidad y una formación como bailarina ideal para las coreografías de acción, y si alguien la ha visto hacer de Terminator bueno en la serie “La crónicas de Sarah Connor” sabrá a qué me refiero.
Lejos de ser una obra maestra, o siquiera un referente del género, “Serenity”, de éxito moderado en USA y nulo en España, es una excelente muestra de que se puede hacer buena ciencia-ficción con las mismas reglas de hace treinta años, sólo poniéndole corazón, algo de ingenio y unos diálogos con algo más de garra que “misa no gusta lo naboo”. ¿Se me oye por allá en el rancho Skywalker?
15 comentarios:
Queda una vez más bastante clara, compa Marc, tu devoción por el género y sus producciones; me alegro de que cuentes con un producto tan entusiasmante (ya sabes que otros aún tardaremos en llegar siquiera a los primeros estadios...).
Un abrazo.
Yo no he tenido el gusto de ver la serie, aunque despues de leer este post me han entrado ganas. Vi la pelicula hace algun tiempo y, aunque desde el principio me dio la sensacion de estar viendo "Star Wars: el remake", la pelicula me pareció entretenida y muy lograda.
saludos
Manuel, por esta película no tengo ninguna esperanza que te pases, teniendo en cuenta tu abyecto pasado... Un abrazo.
Kaytall, yo he visto la serie después de ver la película, y la verdad es que vale la pena. Hay más sentido del humor que en el film, los personajes (lógicamente) están mejor dibujados... No es "Los Soprano", pero se entiende la devoción de los fans. Saludos.
De todo lo que muy bien cuentas, sólo recuerdo haber visto algún episodio suelto de Angel y me pareció un producto digno.
Nunca había oído hablar de Serenity, pero como me distraen las películas ambientadas en la sci-fi, voy a tener que darle un vistazo.
Saludos.
No conozco la serie ni he visto la película, pero igual le echo un vistazo, aunque sea por las coreografías de bailarina.
Saludos
Josep, jamás he visto "Angel" ni "Buffy", de amabs dicen, como mínimo, que, efectivamente, son dignas. No sé. Si te gusta la sci-fi, creo que este film te entretendrá. Saludos.
Mobius, te pasa lo que a la mayoría. Yo, de hecho, tampoco conocía anda, y la pillé en DVD de pura casualidad. Lo cierto es que en USA es un pequeño fenómeno de culto, que se ha escrito un libro sobre la serie, dos series limitadas de cómics (la última, hace escasos meses), y que continuamente se habla de una secuela. El final lo permite, y a mí no me importaría. En cuanto a las "coreografías de bailarina", no quiero llevarte a engaño: River Tam es un personaje que aparece lo justo, a pesar de ser centro neurálgico. Tiene un par de peleas, pero lo hace realmente bien; desde luego, la foto del post demuestra que flexible, lo es... Saludos.
Cuando has hablado de terraformación, la Alianza y que los planetas colonizados son más arcaícos cuanto más lejos de la Tierra están, me ha recordado al escenario que plantea la novela "La paja en el ojo de Dios" de Larry Niven y Jerry Pournelle.
Mi compañero de piso la tiene por ahi, así que la veré en cuanto pueda.
Un saludo.
Anchiano, no conozco esa novela, pero es posible que sea una de tantas referencias de Whedon, aunque él suele referirse a un libro sobre la Guerra de Secesseión, creo, como primera chispa para la idea. Ya me dirás si te gusta la película. Saludos.
Pues he de decir que entre 'Serenity' y 'Hairspray' (con la reseña anterior), coincido plenamente. Son dos películas, sobre todo 'Serenity' que pasaron discretamente y son estupendas. ¡Vale! en cierta manera intrascendentes. Pero ese remake de 'Hairspray' era la mar de entretenido y le hacían entrar a uno ganas de bailar, incluso a un patoso como yo. Y esa aventura en pantalla grande de 'Firefly' naufragó estrepitosamente, pero deja un sabor de boca muy digno. Me parece una gran idea que las reivindiques.
Un saludo.
Pues no tenía yo la menor idea de la existencia ni de la película, ni de la serie ni de nada de lo que hablas, pero no tiene mala pinta, así que si tengo ocasión, le echaré un ojo.
Bueno, te dejo: me voy al cine a ver, ni más ni menos, que Blade Runner, The Final Cut... ¡¡Y EN V.O.S.E.!! Estoy feliz!
Cineahora, a veces parece que se desprecia el cine, o la obra de arte, intrascendente. Hay que aceptar la obra menor, el objeto puramente entertainer, siempre que no insulte a la inteligencia y esté hecho con talento y honestidad. Es el caso de ambos ejemplos, en particular, para mí, de "Serenity", muy reivindicable. Fue un fracaso estrepitoso en España (9ª en taquilla en su primer fin de semana, luego, la nada), no así en USA, aunque tampoco fue el éxito que se esperaba, después del impacto de la campaña viral y del entusiasmo de los fans. Pero el DVD sigue vendiendo, y cada cierto tiempo se especula con una secuela que yo creo que se acabará haciendo. Saludos.
Marta, lo cierto es que no esperaba que mucha gente supiese siquiera de la existencia de esta película. De ahí el post. ¿"Blade runner" en V.O.? ¿The fainal cat? A ver cuánto tarda tito Scott en colarnos otra "refinitive-esta-sí-que-sí version"... Que la disfrutes.
suscribo todo, todito, todo lo que dices de Whedon y su saga espacial (la vi cuando inauguró el festivla de Sitges de hace unos años). Ahora bien: ¿es falso el plano secuencia del principio? ¿cómo se me pudo pasar? Dime donde estan los cortes que la pienso revisar....
Nos leemos!!!!
Vaya, veo que los linternómanos vienen con los deberes hechos... la ha visto más gente de lo que esperaba, y me alegro. Pues sí, es un plano-secuencia falso, pero sólo se puede saber si oyes los comentarios del DVD, porque a primera vista no se nota. Creo recordar que es en un momento en el que Mal entra en una habitación con el bruto de Jayne, pero no lo recuerdo demasiado bien. Saludos.
Al fin la he podido ver a lo largo de esta semana y la verdad es que me ha gustado bastante. Creo que tiene algunas carencias. Una es la de ser esclava de la serie de donde procede, dando cosas por supuestas, desde las relaciones pre-existente entre los protagonistas, el pasado de los personajes, el dibujo del universo donde se mueven, etc. En el extremo positivo, estan los diálogos, que son dinámicos, ingeniosos y sin duda uno de sus fuertes. El personaja de River Tam es lo mejor y la chica lo interpreta con mucha solvencia, la verdad. Lo mejor en conjunto es como apuntas, la honestidad y el cariño de destila la cinta hacia la ciencia ficción y el género de aventuras de siempre. Tienes toda la razón al señalar que "barbitas" podría haber conservado un mínimo del espíritu de esta película para su nueva trilogía y otro gallo hubiera cantado. Vaya, que a ver si hay segunda parte, que yo la pienso ver.
Un abrazo.
Me gusta que los alumnos hagan los deberes que se le mandan para casa. Si además, como es el caso de Anchiano, le da por coincidir en todas mis apreciaciones, entonces es como el poker y ganar. Efectivamente, River Tam es lo mejor de la película, y Summer Glau resuelve el personaje con solvencia. A raiz de ello, se le dio el papel de Terminator "güenecico" en "Las crónicas de Sarah Connor", la serie que engarza argumentalmente "Terminator 2" y "Terminator 3", y que es mejor de lo que yo esperaba, por cierto. Saludos.
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