Hoy toca cortometraje, y advierto que no es para corazones sensibles: si la sangre le da vértigo, joven padawan, cambie de canal. "The big shave" es el tercer largometraje conocido de Martin Scorsese, realizado en 1967 como proyecto escolar en la New York University's Tisch School of the Arts. En un baño blanco impoluto, un hombre se afeita con cierta severidad... Aunque es probable que si no llevara el apellido Scorsese posiblemente no nos llamaría demasiado la atención, es necesario destacar que en este embrionario corto se observan algunas de las constantes que caracterizarán la cinematografía de Marty: el montaje sincopado, la música como complemento anticlimático (en este caso, la trompeta de Bunny Berigan con "I can't get started"), la crudeza de su violencia... y el sentimiento de culpa. ¿Que no? Baste decir que el título alternativo del cortometraje es "Viet'67", y no es azaroso: el film es una metáfora de la participación autodestructiva de los Yuesei en el conflicto vietnamita. Disfrutadlo, si superáis la grima.
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7 comentarios:
Un corto muy curioso, creo recordar que lo habia visto hace ya algun tiempo, pero siempre es interesante revisionar estas cosas.
A mi parecer dentro del corto hay una gran metafora. Una parsimoniosa autodestrucción de uno mismo, llevada a cabo conscientemente, incluso disfrutando de ella.
Un buen ejercicio, no cabe duda, de montaje intencionado.
Prefiero con mucho el título original que remite a la metáfora que apuntas, ya que, el de Big Shave queda demasiado críptico.
Una demostración que los títulos son importantes para establecer un entendimiento con el espectador.
Saludos.
p.d.: Seguro que ese corto fue censurado por Filomatic, la multinacional U.S.A. del acero templado, y promovido por la casa Braun de maquinillas eléctricas..:-)
Buenas, kaytall. La metáfora es precisamente esa que describes (yo no llegaría a decir que disfrutando de ella, simplemente asumiéndolo como algo natural), en referencia al gobierno americano en Vietnam. Saludos.
Josep, yo prefiero el original precisamente por eso, por críptico; "Viet'67" creo que le quita la gracia al corto. Por otra parte, diría que Nivea también tuvo algo que decir al respecto...
Un saludo desde Lápices para la Paz, que aunque ya regresado en misión cumplida (ajja), no olvido a mi tocaya por su apoyo incondicional.
Besos para marcbranches y abrazos a los dos.
Pd- Me acordé mucho de vosotros en el festival de cine...si viérais cómo la gente se emocionaba, murmuraba viendo cada escena...en plan Cinema Paradiso...simplemente mágico, al próximo festival os espero allí.
Hola Alicia bis, encantados de que te pases por aquí, y que te acuerdes de nosotros allí donde se respire cine. ¿En plan "Cinema Paradiso" dices? Pues la Directrice se presenta allí en un plis. Besos.
Pues si que es apurado el afeitado, si... menuda sangría, jejeje...
Nunca había visto este corto, ni sabía de su existencia. Es interesante poder ver los primeros pasos cinematográficos de alguien como Scorsese y creo que tienes razón en que pueden distinguirse ya algunas de las constantes características de su cine, sobre todo en lo que se refiere al montaje, y a la forma que tiene de mostrar la violencia: directa y sin tapujos.
Es un buen corto, sencillo y baratito, pero efectivo e impactante, con ese contraste entre lo impoluto del escenario, la calma con que se afeita el protagonista y la música que acompaña toda la acción... y el resultado final del asunto y la indiferencia que muestra el hombre. No está mal como metáfora.
Saludos!
Lo has definido a la perfección, Laura, tanto la relevancia de ese corto como presagio de la obra de Marty como el significado intrínseco del mismo. Así que utilizaré una de las frases fetiche de este blog: poco más que añadir. Saludos.
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